Los primeros autorretratos robóticos del mundo, pintados por un androide llamado Ai-Da, se han presentado en una nueva exhibición de arte en Londres, a pesar de que el “artista” no tiene un “yo” para retratar. Las imágenes sorprendentemente precisas cuestionan el papel de la inteligencia artificial (IA) en la sociedad humana y desafían la idea de que el arte es un rasgo exclusivamente humano, según sus creadores. Ai-Da es un artista androide de tamaño natural impulsado por IA (algoritmos informáticos que imitan la inteligencia de los humanos) que puede pintar, esculpir, gesticular, parpadear y hablar.

Ai-Da está diseñado para verse y actuar como una mujer humana con voz femenina. Su cabeza y torso parecen los de un maniquí y usa una variedad de vestidos y pelucas diferentes, aunque un par de brazos mecánicos expuestos la delatan como robótica. Un equipo de programadores, roboticistas, expertos en arte y psicólogos de la Universidad de Oxford y la Universidad de Leeds en Inglaterra pasaron dos años, de 2017 a 2019, desarrollando el androide, según The Guardian. Lleva el nombre de Ada Lovelace, la matemática inglesa pionera que es considerada una de las primeras programadoras de computadoras.

Fuente: Harry Baker | Live Science

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