Los peces tienen un sistema sensorial conocido como línea lateral, que les permite detectar movimientos, vibraciones y gradientes de presión en el agua. Los científicos ahora le han dado a un pez robótico su propia versión de ese sistema, permitiéndole determinar la mejor velocidad de natación.
En el estudio participaron investigadores del Instituto Max Planck de Sistemas Inteligentes (Alemania), la Universidad Nacional de Seúl y la Universidad de Harvard. Crearon un robot de cuerpo blando inspirado en un pez, que podía nadar en su lugar contra una corriente de agua que pasaba por un tanque.
Su movimiento de natación ondulante fue posible gracias a una serie de cámaras de silicona unidas, ubicadas a ambos lados de su cuerpo. El aire se bombeaba alternativamente hacia las cámaras de un lado y hacia afuera de las del otro; esto provocó que el lado inflado se expandiera y se curvara hacia afuera, mientras que el lado desinflado se curvaba hacia adentro.
Fuente: Ben Coxworth | New Atlas
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